Motivos de consulta habituales en terapia infantil

La terapia infantil resulta tan importante como la adulta. Muchos niños requieren ayuda por diversos motivos, como la que dispensamos en nuestro centro de psicología clínica en Oviedo. Por ello, un diagnóstico y tratamiento adecuados y con la debida antelación, prevendrán problemas ulteriores que se reflejarían en el desarrollo a largo plazo del menor.

Los diferentes establecimientos repartidos por España, reciben cada día a niños con dificultades de aprendizaje o conducta. Así resulta habitual, como así ocurre en nuestro centro de psicología clínica en Oviedo, encontrarse con trastornos de lectoescritura, de déficit de atención, de expresión oral o incluso del desarrollo evolutivo. Por ello, se hacen necesarias unas estrategias y una orientación adecuadas.

Otros muchos niños sufren por alteraciones de su entorno, como en el caso de separación o divorcio de los padres. Los terrores nocturnos y las pesadillas infantiles constituyen otro motivo habitual de consulta. La inseguridad, la timidez, la tartamudez o, por el contrario, una excesiva impulsividad implican igualmente relaciones pobres o incompletas con compañeros y familiares.

Muchas veces el bajo rendimiento escolar representa un primer signo de alarma. En este sentido, una atención pormenorizada por parte de un psicólogo nos llevaría a identificar una posible dislexia, disortografía, disgrafia, discalculia o algún tipo de trastorno de la personalidad. Podría darse el caso de que el niño sufriera también episodios de epilepsia o haber padecido algún tipo de accidente neurológico.

Resulta igualmente vital, detectar a tiempo toda la gama del espectro del autismo, el síndrome de Asperger, el de Tourette o el denominado TADH. Identificarlos a la mayor brevedad posible y tratarlos con la ayuda de un profesional, repercute en la calidad de vida del pequeño. Asimismo, en su etapa adulta podrá comportarse de acuerdo con unos patrones férreamente señalizados.

Precisamente, en el Centro GOA te ofrecemos este tipo de soluciones, de forma que nos adecuamos tanto a los padres como a los hijos.